martes, 7 de mayo de 2013

Las dramáticas consecuencias de las reformas sanitarias


La Plataforma Contra la Privatización de la Sanidad de Aragón se ha entrevistado con Gabriel Fuertes Royuela, teniendo el testimonio directo de este jubilado de 65 años de edad, que el 25 de abril en un acto de desesperación, al no poderse costear los medicamentos que necesita para su enfermedad, se intentó “quemar a lo bonzo” en el Servicio Provincial de Salud del IASS.

Gabriel declara que nunca quiso poner en peligro la vida de nadie, excepto la suya propia. Por lo que desmiente el haber rociado con gasolina las instalaciones de dicho edifico público. Tras ser reducido por el director del centro y los cuerpos policiales fue ingresado, en situación de incomunicación, en el módulo penitenciario del hospital Miguel Servet, bajo la acusación de amenazas. A partir de ese momento, Gabriel continuó manifestando su protesta, negándose a ingerir alimentos durante siete días. A día de hoy, encontrándose ya en la planta de psiquiatría, está comiendo regularmente y seguirá hopitalizado a la espera de su recuperación.

Gabriel sufre una invalidez, desde los años noventa, a causa de una poliposis adenomatosa familiar. Actualmente, recibe una pensión del Régimen General de la Seguridad Social de 764€. Cómo única fuente de ingresos y tras descontar los gastos fijos a los que deben hacer frente, él y su mujer disponen, en el mejor de los casos, de 150€ para todo el mes. Desde la introducción de los repagos, con la aplicación del Real Decreto ley 16/2012, los 17 medicamentos necesarios para su afección le suponen una media de 30€ mensuales.

Estamos ante un ejemplo más de las graves consecuencias que provocan las medidas genocidas impulsadas por el gobierno (a las que debemos añadir la última propuesta de recorte de 3.000 millones de euros en sanidad y dependencia) y de su repercusión dramática en los sectores más vulnerables de la población como son, en el caso que nos ocupa, los pensionistas.

Denunciamos la falta de escrúpulos del consejero Ricardo Oliván quien, aún siendo responsable de la situación de total desamparo y desprotección de un sinfin de personas, se permite insultar a los pacientes de la sanidad aragonesa acusándolos de “barcenismo”.

Por todo ello, desde la Plataforma Contra la Privatización de la Sanidad de Aragón manifestamos nuestro apoyo y solidaridad a Gabriel Fuertes, exigimos la inmediata derogación del real Decreto- ley 16/2012, por el cual se pierde un derecho humano básico como es el de la salud, y responsabilizamos a los representantes políticos de