jueves, 5 de septiembre de 2013

La unificiación de los centros de salud mental acaba en protesta

La unificación de los centros de Salud Mental siguen sin convencer a pesar de que el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, aseguró que la atención al paciente se mejorará. Ante el escepticismo, asociaciones de vecinos, afectados y profesionales de la materia sacarán el debate a la calle a través de diversos puestos informativos. Antes de que esto ocurra, esperan que Oliván se reúna con ellos para explicarles las mejorar que conllevaría la unificación de los centros.
El objetivo es acercar el conflicto a la gente y las razones por las que rechazan esta agrupación de servicios. "Informaremos de los problemas que puede ocasionar dejar a los barrios sin este servicio", explicó Charo Jiménez, de la Asociación de Vecinos La Paz. Además, reunirán firmas en contra del Sector II para trasladar el malestar conjunto de al departamento de Sanidad.
Este será el primer paso. Asociaciones vecinales y de enfermos mentales, psicólogos, psiquiatras, personal de los centros afectados y distintos agentes sociales acordaron ayer realizar una jornada callejera durante un fin de semana en el que los familiares se impliquen.
Pero antes de salir a la calle los vecinos confían en que Oliván acepte su propuesta y se reúna con ellos. El martes, un representante de las entidades presentó en el registro una solicitud para formalizar un encuentro con el responsable del área de Sanidad del Gobierno aragonés para poder transmitirle sus preocupaciones y exigir un informe técnico que demuestra los beneficios de reducir de seis a dos el número de centros de atención a la salud mental. "

EN SECRETO
La presidenta de la agrupación del barrio de La Paz denunció "la falta de planificación e información" por parte de los responsables del cambio. "Varios de los trabajadores de los centros sanitarios todavía no han sido informados de los cambios", explicó. Según Jiménez, el personal "sobrante" que señaló el consejero Oliván va a redirigirse a la unidad de día del hospital Miguel Servet de Zaragoza "porque no tienen personal ni dinero para nuevas contrataciones".
Jiménez acusó al departamento de carecer de información para justificar la reodernación. "No tienen documentos ni estudios de demanda" algo "básico" para llevar a cabo una reforma de este calibre, señaló.
La presidenta de la agrupación vecinal informó que Belchite y Fuentes de Ebro también se van a ver afectados con la unión de centros de salud, motivo por el que se han unido a los actos de protesta.